Los médicos frente a las amenazas y oportunidades relativas al uso de las redes sociales


Las oportunidades potenciales de las redes sociales, como Facebook y Twitter, para mejorar la salud deben ser consideradas con cuidado frente a los peligros y responsabilidades asociadas a su uso, según la Asociación Médica Mundial. Los médicos hacen uso de la tecnología a diario en sus trabajos y el acceso a estos productos no debe suscitar temor; si se utilizan con prudencia las redes sociales pueden ser beneficiosas.

Un documento de debate, elaborado por la Red de Médicos Jóvenes de la AMM, presenta un análisis sobre la manera en que las redes sociales se relacionan con los pacientes, la profesión médica y la salud y concluye que cualquier beneficio para los pacientes sólo se obtendrá si los médicos tienen la misma prudencia, ingeniosidad y rigor científico inherentes a la misión profesional y a sus responsabilidades.

El documento destaca el uso de los medios sociales que hacen millones de personas y presenta las oportunidades y amenazas para cómo se practica la medicina. Para los pacientes, las redes sociales facilitan el acceso a la información de salud en Internet y permite la creación de grupos de soporte que mejoren los resultados y conocimiento de las enfermedades. Sin embargo, el documento hace notar que tales foros pueden ser víctimas de abusos  de parte de agentes inescrupulosos y el acceso cada vez más fácil a la información o desinformación puede alterar la relación médico-paciente, en particular en materia de diagnóstico, pruebas y tratamiento.

El documento afirma que las organizaciones públicas y privadas pueden utilizar las redes sociales para «mejorar los conocimientos sobre salud de la población y a nivel de pacientes en particular. Pero estas organizaciones enfrentan desafíos para proteger su credibilidad electrónica y deben luchar contra la desinformación que circula en Internet.

Para los médicos, el documento reconoce la posibilidad de limitar las fronteras profesionales, el riesgo de violar la privacidad o la conducta no profesional. Preocupa en especial la protección de la privacidad y confidencialidad del paciente, confianza sagrada en la relación médico-paciente, que  los autores consideran amenazada por este universo cada vez más cibernético.

El documento advierte a los médicos que sus mensajes personales y comportamiento pueden poner en peligro su reputación personal y profesional en su totalidad. «El enorme potencial de las redes sociales debe ser bien mitigado por una toma de conciencia de los riesgos relacionados con la facilidad de la difusión y la duración de la información digital. Estos riesgos deben ser manejados bien por los médicos y las asociaciones de médicos».

También incluye una fuerte advertencia sobre los sitios en internet que clasifican con notas a los médicos, lo que es un desafío para su reputación.

Los recientes  y numerosos sitios de clasificación no ofrecen solución para verificar los estudios que pueden destruir la reputación del médico. El hecho de compartir rápidamente información puede causar pánico y temor por las enfermedades y tratamientos a través de las redes como Facebook y Twitter.

El año pasado por primera vez la AMM entregó recomendaciones a los médicos sobre el uso de las redes sociales.  Se aconsejó a los médicos a mantener las fronteras apropiadas de la relación médico-paciente conforme con las normas éticas profesionales, controlar regularmente su presencia en Internet, adoptar un enfoque prudente cuando difundan información personal y asegurar que ninguna información identificable del paciente sea subida a las redes sociales. Muchas asociaciones médicas nacionales proporcionan normas sobre el uso de las redes sociales y el consejo de la AMM a las AMNs es establecer normas completas sobre las informaciones difundidas sobre el médico, el comportamiento, formación y educación sobre el uso debido de las redes sociales, como también la privacidad, confidencialidad, profesionalismo y conflicto de intereses en el uso de estas tecnologías.

El Dr. Mukesh Haikerwal, Presidente del Consejo, expresó: «Este documento proporciona una evaluación útil para todos los médicos y servirá de base para que la AMM elabore otras normas para la profesión. Sin dudas que Internet representa para la profesión médica un poderoso recurso nuevo para la atención de los pacientes. Pero este recurso debe ser manipulado con responsabilidad y prudencia».