Médicos del mundo llaman a terminar con la mutilación genital femenina


La Asociación Médica Mundial (AMM) y la Federación Internacional de Ginecología y Obstetricia (FIGO) hacen un llamamiento a terminar con la mutilación genital femenina, una grave forma de violencia contra la mujer.

En el día internacional de Tolerancia Cero con la MGF (6 de febrero), las dos organizaciones que representan a millones de médicos y 124 asociaciones de obstetricia y ginecología en el mundo, condenan enérgicamente la medicalización de la mutilación genital femenina.

El Profesor Gamal I. Serour, Presidente de FIGO, dijo: “Algunos ejemplos de las consecuencias extremas son: muerte, fuertes dolores, hemorragias, tétano, sepsis  infecciones urinarias recurrentes, inflamación pélvica, infertilidad, complicaciones en embarazos y parto y también  efectos adversos psicológicos y sexuales. La práctica de la MGF viola los principios de derechos humanos”.

Afirmó que un reciente informe de la Organización Mundial de la Salud sobre la mujer y la salud indica que hubo una leve disminución de la MGF estos últimos años, una baja de la edad en la que realiza la MGF y un notorio aumento en la proporción de niñas que tuvieron una MGF antes de los cinco años de vida. El informe también agrega que existe una creciente tendencia a que la MGF sea realizada por profesionales de la salud.

El Dr. Dana Hanson, Presidente de la AMM, dijo: “La medicalización de la MGF es muy preocupante para nosotros, ya que infringe flagrantemente el código de ética médica. No es necesario recordar a los médicos los graves peligros del la MGF para mujeres y niñas para que desistan de realizar o promover esta práctica. Existe una violación de los derechos humanos de la mujer que los médicos y otros profesionales de la salud no deben practicar bajo ninguna circunstancia. Esperamos que los médicos y las asociaciones médicas adopten una posición más firme contra estos peligrosos y degradantes tratos”.

El Prof. Serour afirmó que los profesionales de la salud pueden tener un papel único en el esfuerzo por eliminar la MGF, a fin de asegurar que las niñas y mujeres gocen a cabalidad de sus derechos humanos y libertades y que sean tratadas con dignidad y comprensión.